Revisión – Bonehill Road (2018)

callejón sin salida

Permítanme comenzar esta reseña diciendo que SIEMPRE he sido un fanático de las películas de hombres lobo. Si bien el vampiro es sexy, seductor y te permite coquetear con la muerte sin tener que casarte siempre con ella, el cortejo del hombre lobo con la enorme negrura del terror siempre ha estado empapado de rojo. Son máquinas de matar, tiburones en tierra y ver uno es finalmente ver tu destino.

bonehilroad-eli-degeerTodd Sheets ha logrado crear una película que se siente más como un retroceso del cine que la mayoría de los guiños brillantes y altamente publicitados a los años 80 y 90 que están trabajando para saturar el mercado cada fecha de lanzamiento. Esto SE SIENTE como una película que recogería de mi tienda de videos mamá y papá local un viernes por la noche. Funciona con el mismo tipo de impulsos de terror indie sin complejos que hicieron que esa era del cine de terror fuera tan divertida. Es crudo, áspero en los bordes Y lleno de corazón y pasión.

La película sigue a una madre y una hija (Eli DeGeer y Ana Plumberg) mientras corren para escapar del abuso que han sufrido bajo el hombre en su casa. De camino a la casa del padre de Emily, toman Bonehill Road, un giro que los dejará luchando por sus vidas contra una nueva amenaza, una hambrienta implacable y que necesita un buen afeitado.

Las amenazas en Bonehill Road son numerosas y funcionan para guiar a la audiencia en un viaje de perseverancia mientras tanto la madre como la hija pasan por un guante de dolor físico y emocional. ESTA es la relación que demuestra que Bonehill Road es más inteligente de lo que el espectador casual supondría. Tanto DeGeer como Plumberg son convincentes como una familia en desacuerdo que está tan acostumbrada a luchar, tan acostumbrada a luchar que la idea de finalmente salir de sus luchas es a la vez extraña y, a veces, más aterradora que los obstáculos que propone. Venden la película y de una manera que te das cuenta de que realmente quieres verlos prevalecer.

Si algo va en contra del corazón de Bonehill es el segundo acto de la película. Mientras Eden y su madre huyen de lo sobrenatural en el largo tramo de la carretera que sirve como homónimo de la película, sin saberlo se topan con la última incursión de un asesino en serie en el masoquismo mientras torturosamente tortura a otro grupo de mujeres. Entiendo que se nos presenta otro escenario en el que Emily se ve obligada una vez más a salir de la subyugación de otro hombre, empeñada en destruirla a ella y a su hijo. Funciona, pero dura demasiado, ya que estos son los momentos en los que la película está más sin pulir y persiste en algunas de las actuaciones más débiles. Linnea Quigley, incluso en medio de este segundo acto, ofrece una de sus mejores actuaciones, saliendo de los estereotipos habituales.

Bonehill es gloriosamente independiente y, si puedes ver más allá de algunas de sus deficiencias de bajo presupuesto, es una gran película de criaturas con pistas destacadas y una notable criatura práctica f / x. Recomendado.